Paul Poiret fue uno de los grandes diseñadores de principios del siglo XX, cuyos diseños no solo revolucionaron la moda femenina sino que marcaron un antes y un después en la Alta Costura parisina, al dar un giro radical a la estética imperante durante la llamada Belle Époque, cuando liberó a la mujer del corsé, reavivó el estilo Imperio, impuso las medias color carne y creó la falda tubo, entre muchas prendas de inspiración griega u oriental. A pesar de alcanzar fama mundial y de vestir a importantes damas y actrices de aquellos tiempos, su éxito se difuminó en los años 20, muriendo en la más absoluta pobreza y olvidado del mundo en un París rendido a su gran rival, Coco Chanel.
Un creador, apodado en su día como el ‘rey de la moda’, que ahora, casi 90 años desde la desaparición de su maison, volverá a las filas del Haute Couture gracias al relanzamiento de su firma, un esperado acontecimiento que verá la luz el próximo 4 de marzo liderado por el grupo coreano del lujo Shinsegae International y por la diseñadora china Yiging Yin, directora creativa de la nueva casa Poiret.
Según informa Vogue, la legendaria firma Poiret – como registro de marca- fue recuperada hace años por Arnaud de Lummen, dueño de la compañía inversora Luvanis, especializada en recuperar enseñas míticas para su posterior subasta. Pero, tras un tiempo en el que diversos grupos empresariales se interesaron por esta enseña, a principios de 2015 se anunció la venta y traspaso de Poiret al gigante coreano Shingsegae. Un conglomerado conocido por sus alianzas comerciales con etiquetas de lujo como Givenchy, Céline, Brunello Cucinelli, Moncler o Burberry, además de poseer marcas como Vov y Vidi Vici.
Ahora, a poco menos de un mes para que renazca Poiret la gran incógnita radica en si se mantendrá el espíritu de sus diseños en un nuevo mundo de moda ajeno a la Alta Costura de antaño.
Repasa la historia de Paul Poiret en la sección de esta revista, Vidas de Moda (pincha aquí).
Texto: El Atelier.
